Mabel González (24) falleció producto de un paro cardiorrespiratorio luego de ser revisada en el hospital de Casablanca, en la posta rural de la comuna y en el hospital Carlos van Buren.
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Impotencia, desolación y mucha pena. Estos son los tres sentimientos que mejor definen el sentir de una familia que sufrió la pérdida de una joven madre de 24 años, luego que fuera diagnosticada erróneamente en tres centros asistenciales del Servicio de Salud Valparaíso - San Antonio (SSVSA).
Todo comenzó el lunes 3 de junio, cuando a las 17:00 horas, Mabel González (24) llamó a su madre, Mónica Álvarez, señalándole que sentía un fuerte dolor en el pecho, adormecimiento de su cara y mano izquierda, razón por la que acudió, junto a su pareja, al hospital San José, ubicado en la comuna de Casablanca.
Tras salir del box de atención, la madre contó a La Estrella de Valparaíso que para entonces, su hija "estaba amarilla del dolor, con el ritmo cardíaco acelerado, pero igual la mandaron a esperar por su atención". Tras seis horas de espera, a eso de la 1:45 horas del martes 4 de junio, una doctora la atendió y le dio dipirona, betametasona y suero, por un diagnóstico de cefalea.
A la mañana siguiente, Mabel fue a la posta rural de Casablanca, donde la vio una doctora venezolana, que la examinó, le dio medicamentos y le pidió una radiografía, la cual se comprometió a llevar en la tarde. Sin embargo, no pudo porque nuevamente volvieron los dolores, así que retornó a la posta, donde la misma facultativa la revisó y le dijo que sólo había sufrido de una crisis de pánico. En la tarde volvieron a ir a la posta, desde donde le dijeron que la llevaran a Valparaíso porque "el electrocardiograma está malo", según le confesaron a la madre desde la posta rural casablanquina.
Pasadas las 15:00 horas llegó al hospital Carlos van Buren de Valparaíso, donde durante la jornada fue revisada por cuatro médicos de turno, los cuales se suman a los otros que la vieron en Casablanca.
Al día siguiente, el miércoles 5 de junio, a eso de las 10:20 horas, la joven comenzó a gritar y a convulsionar en el piso. La situación era grave, indicaron desde el centro asistencial porteño. Quedaría hospitalizada por un cuadro de trombosis y ataque de epilepsia. Cerca de 90 minutos más tarde, la joven Mabel González había fallecido. "Se supone que la iban a estabilizar para dar un diagnóstico más certero, pero el doctor nos dijo que la paciente había luchado por su vida y que había muerto por un paro cardiorrespiratorio y una anemia severa hemolítica", indicó su madre al matutino.
Tras esta lamentable cadena de hechos, la familia de la joven pidió "que se haga justicia para que a nadie más le pase esto y que los médicos sean más humanos y empáticos". En ese sentido, el diputado Andrés Celis (RN) se comprometió a trabajar en la presentación de una denuncia en la Contraloría Regional de Valparaíso, para perseguir las responsabilidades administrativas en el caso. De igual manera, oficiará a la Superintendencia de Salud, para que verifique si el hospital de Casablanca actuó dentro de la normativa.
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