Los calzados estaban almacenados en una bodega en la comuna de San Miguel y dispuestos para ser vendidas en el barrio Meiggs.
Tras un trabajo de varios meses en conjunto con la Brigada Investigadora de Delitos Contra la Propiedad Intelectual (Bridepi) de la Policía de Investigaciones (PDI) y personal de la Dirección de Seguridad Vecinal de la Municipalidad de Santiago, se logró la incautación 7.683 pares de zapatillas falsificadas.
Los calzados estaban almacenados en una bodega en la comuna de San Miguel y dispuestos para ser vendidas en el barrio Meiggs. Las especies fueron avaluadas en unos $250 millones.
El director de Seguridad de la Municipalidad de Santiago, Arturo Urrutia, llamó a los consumidores a "preferir los locales y tiendas establecidas y a no comprar en el comercio ambulante ilegal, porque no sólo se arriesgan a una multa, sino que también a adquirir productos de muy mala calidad y dudosa procedencia".
Por su parte, Marco León, comisario jefe de la Bridepi, indicó que el propietario de la bodega, un empresario de nacionalidad china, "mantenía grandes volúmenes de zapatillas que comercializaba y distribuía en Meiggs, emulando la marca original Puma y Vans, incurriendo en la infracción de la Ley de Propiedad Industrial. Los productos fueron retirados del mercado y se procederá a su destrucción".
El propietario de la bodega fue infraccionado por infracción a la Ley N° 19.039 de Protección de los Derechos de Propiedad Industrial.
PURANOTICIA