El grupo extremista Al Shabab, con sede en la vecina Somalia, se atribuyó la responsabilidad del atentado.
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Un complejo hotelero de lujo, en la capital de Kenia, Nairobi, fue atacado con una explosión y un fuerte tiroteo que dejó un saldo de siete personas muertas y unas 30 lesionadas. El grupo extremista Al Shabab, con sede en la vecina Somalia, se atribuyó la responsabilidad y dijo que sus miembros seguían luchando en la zona.
Testigos y policías en el lugar de los hechos lo describieron como "el ataque terrorista más reciente", en un país que ha visto varios atentados mortíferos en los últimos años.
El hecho ocurrió en el vecindario de Westlands, que alberga al lujoso hotel DusitD2, además de varios bancos y oficinas. Vehículos estallaron en llamas y numerosas personas fueron evacuadas del lugar.
Los disparos duraron varios minutos tras ser reportados inicialmente. Emanaba una espesa nube de humo negro de la zona, señalaron testigos. "Hemos enviado agentes al lugar, incluso de la unidad antiterrorista, pero aparte de eso no tenemos más información" dijo posteriormente el portavoz, policial Charles Owino.
Acudieron al lugar ambulancias, patrullas policiales y camiones de bomberos. Un gran grupo de mujeres fue evacuado de la zona por las fuerzas de seguridad. Luego, otros grupos fueron sacados a medida que la policía fue de tienda en tienda.
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