El proyecto propone modificar la ley General de Educación y busca prohibir que se condicione la permanencia de estudiantes al consumo de fármacos para tratar trastornos.
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Un apoyo transversal en la Cámara Alta tiene el proyecto que prohíbe que las escuelas obliguen a la suministración de medicamentos a los alumnos a fin de mantener su matrícula o el ingreso a los recintos educacionales.
La mayoría de los senadores criticaron que la excesiva medicación y el sobre diagnóstico que están presentes en las aulas.
De esta forma, la iniciativa que está en el segundo trámite legislativo, pretende impedir que los establecimientos educacionales condicionen la incorporación, asistencia o permanencia de los estudiantes al consumo de medicamentos para tratar trastornos de conducta.
El proyecto, en sí, propone modificar la ley General de Educación y la ley sobre Subvención del Estado a establecimientos educacionales, en el sentido de prohibir que se condicione la permanencia de estudiantes al consumo de fármacos para tratar trastornos, haciendo referencia –principalmente- al de déficit atencional e hiperactividad.
Al respecto, la senadora Yasna Provoste recordó que el texto legal ha tenido respaldo transversal y que la propia Superintendencia de Educación ha redactado dictámenes en orden a que los establecimientos no pueden obligar a padres y apoderados a suministrar medicamentos con el propósito de mantener la matrícula, sumado a lo establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por su parte, el senador Juan Ignacio Latorre hizo presente que se requiere una urgente política de salud mental en los centros de educativos, para así atacar el problema de fondo.
"Chile tiene altas tasas de suicidios infanto juvenil, por ello no se deben abordar solo los síntomas con medicamentos", planteó.
Cabe mencionar que el análisis y discusión de este proyecto de ley será retomada durante la próxima sesión de Sala.
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