Dudas se generaron teniendo en cuenta que la mujer que sacrificó a su bebé de dos días el 2012 mantuvo reuniones de culto, presuntamente del tipo espiritual, tras ser condenada por parricidio.
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La Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE), de la PDI Metropolitana, reveló que en el domicilio anterior donde vivía Natalia Guerra Jequier, la madre del bebé de dos días que el 2012 fue sacrificado por la 'Secta de Colliguay', se encontraron restos de una fogata similar a la que se realizó en el sector rural de Quilpué donde se dio muerte al bebé, por orden del líder de la organización, Ramón Castillo, alias 'Antares de la luz'.
Así lo indicó el comisario Juan Pardo, jefe (s) de la BIPE Metropolitana, quien señaló al diario El Mercurio de Valparaíso que "cuando los nuevos arrendatarios llegaron al domicilio (en Calera de Tango) y supieron que allí vivía Natalia Guerra (encontraron una tarjeta de crédito de ella y su licencia de conducir), nos informaron que en el patio habían rastros de una fogata".
Respecto a ella, el oficial policial detalló que "estaba hecha en el suelo y tenía similares características a las anteriores. Tenía rasgos atípicos" y agregó que "periciamos el sector con peritos químicos y bioquímicos, con perros y con buscadores de cuerpo, con el fin de descartar alguna situación que fuese reiterativa con respecto a la 'Secta de Colliguay'. Esto se hizo antes de que ella fuera detenida y se descartó cualquier sospecha".
Esta situación hizo aumentar las sospechas respecto a lo señalado al momento de su detención: Natalia Guerra habría continuado realizando reuniones de culto, presuntamente del tipo espiritual. Así lo dio a conocer la PDI el pasado 9 de julio, cuando explicó que a su domicilio en Isla de Maipo asistían unas cinco personas periódicamente; esto, mientras la mujer se encontraba prófuga luego de ser condenada a cinco años de presidio efectivo por parricidio.
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