A todos nos ha pasado: llegar a casa tarde en la noche o a la madrugada, muerto de hambre y nada de comer.
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A todos nos ha pasado: llegar a casa tarde en la noche o a la madrugada, muerto de hambre (quizás por el benevolente efecto del alcohol en nuestro sistema). En el caso de que tengas una heladera bien provista, siempre podemos recurrir a las hamburguesas o los hot dogs nocturnos, ¿pero qué sucede si no?
En los países que cuentan con estos maravillosos servicios, un delivery a las 4AM se vuelve una opción muy apetitosa.
Eso fue lo que le sucedió al usuario de Twitter, Bert Yong, de Manchester, Reino Unido. Llegó a su hogar hambriento, deseoso de una buena porción de kebabs y papas fritas, agarró el teléfono, realizó el pedido y se dispuso a esperar... Cayó dormido al instante.
Al otro día se levantó con un sentimiento de culpa y tristeza. ¡Había perdido su cena y molestado a un pobre trabajador! Pero cuando abrió la puerta de su casa se encontró con lo siguiente.
"Comida ordenada a las 4 am y entonces me quedé dormido. Sólo encontré esto en el frente de mi casa"
Así es, su pedido colgado de la puerta, en parte como un símbolo de la vergüenza por haberlo hecho ir hasta ahí, en parte como un acto de absoluta justicia. "Aquí está tu comida, espero que la disfrute cuando despiertes", pareciera ser el mensaje.
Su carne de kebab y sus dos (si, ¡dos porciones!) de papas fritas estaban ahí. Lo que nos sorprende es que ningún transeunte haya tomado la decisión de robárselas.
"Parece que estaba hambriento"
Con alegría, lo calentó en el microondas y disfrutó de un desayuno para reyes.
Los usuarios de Twitter que leyeron la historia solo tenían palabras de alabanza y elogio para este repartidor, transformado en héroe anónimo.
"Esto es absolutamente heroico"
"Qué gran regalo con el cual levantarse"
Esto demuestra que no todos los héroes usan capa. Así que ya lo saben, niños: denle buenas propinas a los repartidores, nunca saben cuándo los salvarán.
