El hoy prófugo de la justicia chilena pidió enfáticamente contratar una oficina de abogados en el país.
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Cerca de 900 millones de pesos sería el monto defraudado por Rafael Garay en sus distintas sociedades a diferentes inversionistas que confiaron en él sus dineros para ser rentados en negocios y empresas no tradicionales.
El economista quien se encontraría en Rumania se contactó con amigos y familiares dando así señales de vida a los cuales les solicitó contratar una oficina de abogados que lo defienda.
En estos momentos Garay enfrenta un delito de apropiación indebida y estafa que el Ministerio Publico deberá probar, las penas que podría enfrentar Rafael Garay llegan a los tres años y un día, situación que puede aumentar de acuerdo a los montos involucrados.
PURANOTICIA
