Luego de visitar el Cristo Redentor, dos motociclistas quisieron ir a la playa pero la ruta sugerida por GPS los llevó a una zona peligrosa.
visitas
Un turista italiano murió este jueves por un disparo en la cabeza después de acceder por un error del GPS a una favela de Río de Janeiro, y ser confundido por los agresores como un policía local.
El fallecido, identificado como Roberto Bardella, de 52 años, y su compatriota Rino Polato, viajaban en moto luego de visitar el famoso Cristo Redentor y querían dirigirse a la playa. Sin embargo, guiados por la aplicación de navegación, se adentraron por error en el "Morro dos Prazeres" (Morro de los Placeres), cerca al barrio de Santa Teresa, según informó la Policía Civil de Río de Janeiro.
Los dos turistas "fueron recibidos a tiros" y posteriormente, obligados por los criminales a "meterse en un auto", donde estuvieron rehenes mientras el vehículo circulaba por la comunidad. La víctima llevaba en la cabeza un casco con cámara y los agresores pensaron que se trataba de policías que estaban grabándolos, por lo que efectuaron disparos.
En un momento determinado, los captores decidieron liberar a Polato ya que no poseía ninguna cámara en su casco, al contrario que Bardella, cuyo cuerpo fue encontrado en una de las calles de la favela, mientras que Polato fue rescatado en uno de los accesos a la comunidad por agentes de la Unidad de Policía Pacificadora (UPP).
El Departamento de Homicidios de la Capital de Río de Janeiro señaló en un comunicado que investigará el caso y el Batallón de Operaciones Especiales (Bope) ha desplegado un operativo en la favela.
Las motos fueron halladas, pero habían sido lavadas para borrar toda huella, y no se encontraron las pertenencias de los turistas.
Según las investigaciones preliminares, Bardella y Polato habían emprendido un viaje para recorrer en moto varios países sudamericanos que les había llevado ya a Paraguay y Argentina antes de llegar a Río de Janeiro, donde se hospedaron en un hotel de Copacabana, a fin de conocer los puntos más turísticos.
Sumida en una severa crisis económica, la ciudad que acogió hace unos meses los Juegos Olímpicos vive actualmente una fuerte alza en sus ya elevados índices de violencia urbana, y un ajuste de presupuesto redujo la presencia policial. Además, los enfrentamientos en las favelas han crecido en los últimos meses por la guerra abierta entre bandas por el control del narcotráfico.
PURANOTICIA / AGENCIAS
