Un juez federal mexicano condenó a 52 años de cárcel a un general del Ejército por los delitos de tortura, homicidio y destrucción de un cadáver.
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El Consejo de la Judiciatura Federal indicó que el general Manuel Moreno Aviña ordenó en 2008 que un joven fuera torturado durante varias horas para obtener información sobre la muerte de un soldado en el estado norteño de Chihuahua.
Se dijo que la víctima, José Heriberto Rojas, fue detenido vivo en la ciudad de Chihuaua en julio de 2008 por elementos del ejército.
Posteriormente fue trasladado a una instalación militar, amarrado y torturado con el propósito de obtener información.
Los hechos ocurrieron mientras otros elementos del ejército interrogaban a otros individuos.
Se informó asimismo que los actos de tortura se prolongaron varias horas hasta que la víctima falleció "muy probablemente" por paro cardíaco debido a las descargas eléctricas que sufrió el individuo.
Posteriormente el general ordenó que el cuerpo de la víctima fuera trasladado a una finca, donde fue "incinerado de forma clandestina".
Reparación
El Consejo dictaminó que, además de la condena de Moreno Aviña, "la Secretaría de Defensa debe ofrecer una disculpa pública, aceptar su responsabilidad en el asesinato de Rojas Lemus y garantizar que este tipo de hechos no se repitan".
Y también se ordenó a la dependencia que "reestablezca la dignidad y reputación de la víctima" y efectúe un pago de reparación a sus familiares por un monto de US$14.500.
Otros generales mexicanos han sido sentenciados en el pasado por corrupción o vínculos con el narcotráfico.
Pero la condena de Moreno Aviña ocurre cuando otros escándalos están sacudiendo al Ejército mexicano.
Uno de ellos por un video que comenzó a circular en las redes sociales que muestra a una militar y un policía torturando a una mujer mientras es interrogada.
Esta semana un tribunal inició un proceso penal contra dos soldados y tres policías que supuestamente participaron en esos hechos que, se dijo, ocurrieron en 2015. Por este hecho, el secretario de Defensa y jefe de las fuerzas armadas, general Salvador Cienfuegos, pidió disculpas públicas.
Además este lunes comenzó otro juicio contra soldados acusados de secuestrar y asesinar en 2015 a siete jóvenes en el estado de Zacatecas.
Otro caso que está afectando la imagen del ejército es la desaparición de 43 estudiantes en Ayotzinapa, en el estado de Iguala en 2014.
Entre las preguntas que aún quedan pendientes en relación a este caso está la de cuál fue el papel del batallón militar local la noche en que ocurrió la desaparición de los estudiantes y si el Ejército pudo haber intervenido para proteger a los jóvenes.
BBC
