Alzheimer: Chilena investiga posible rol de carnes y lácteos en su tratamiento

Andrea Paula-Lima, del Instituto de Neurociencia Biomédica.

Sábado 23 de marzo de 2013 a las 23:44 horas


Nacional

Un antioxidante presente en diversos alimentos, tales como: carnes y lácteos, podría tener implicancia en la prevención y tratamiento del Alzheimer, enfermedad que genera daño oxidativo en las neuronas. Así lo demuestran las investigaciones de Andrea Paula-Lima, Doctora en Química Biológica del BNI, Instituto Milenio de Neurociencia Biomédica, y quien acaba de ser premiada internacionalmente con el Junior Faculty Award, en la ciudad de Florencia, Italia.


La especialista es la única profesional de Latinoamérica que este año obtuvo el galardón, entregado en el marco del 11th International Conference on Alzheimer’s & Parkinson’s Diseases. Esto, gracias a sus hallazgos sobre los mecanismos de esta patología neurodegenerativa, caracterizada por la pérdida progresiva de la memoria y otras capacidades mentales, y que afecta al 4% de los adultos mayores de 60 años, según estadísticas.


“He trabajado durante muchos años y de forma muy seria en esta área, en colaboración con la Dra. Cecilia Hidalgo y el Dr. Sergio Ferreira, destacados científicos. Sin embargo, este es un reconocimiento que no esperaba y siento mucha satisfacción por saber que la elección del premio se debe, fundamentalmente, a la calidad de la investigación. Y es que resulta muy difícil hacer ciencia en Latinoamérica, a diferencia de países como Estados Unidos y Alemania”, señala.


Antioxidante preventivo
En sus trabajos de Doctorado y Postdoctorado, la científica del BNI y académica de la Universidad de Chile –oriunda de Brasil-, ha indagado con éxito en la enfermedad de Alzheimer, tanto en la comprensión de sus mecanismos, como en el estudio de potenciales blancos preventivos y terapéuticos. Esto, considerando que aún no existe una cura efectiva para este mal, sino más bien, medicaciones que pueden alargar la fase inicial del Alzheimer, cuando éste no es tan invalidante.


Sus hallazgos, se han enfocado en el rol de un péptido llamado beta-amiloide, considerado como agente causal de la enfermedad, según estudios internacionales. Y es que, cuando las neuronas producen altas concentraciones de este péptido, se generan agregados solubles de este elemento –oligómeros-, que producen un excesivo aumento de especies oxidantes, lo que es peligroso para la función cerebral. “Esto puede gatillar desbalance en los procesos normales de las neuronas, que conllevan a la inhibición de la función de memoria y aprendizaje, y a la larga, a la muerte de las mismas”, explica la Dra. Paula-Lima.


Ante este escenario, vinculado al origen de la enfermedad, la profesional ha realizado un descubrimiento alentador para la ciencia mundial. Se trata del hallazgo de una sustancia que puede evitar la progresión de este péptido nocivo.


Esto es: un antioxidante que se encuentra presente de forma natural en el organismo, pero que disminuye considerablemente a medida que la persona envejece. No obstante, “dicha sustancia también está contenida en una serie de alimentos, principalmente en carnes, pescados, mariscos, aves, productos lácteos y huevos, es decir, alimentos ricos en proteínas”, detalla.


Trabajo en laboratorio y con pacientes
Las investigaciones que comprueban la eficacia de este elemento, ya se han realizado en cultivos celulares, pero actualmente, también se están ejecutando estudios en modelo de ratas. “Estamos realizando inyecciones del péptido en el cerebro de las ratas para observar el comportamiento de éstas y también, analizar alteraciones en su cerebro. Recientemente, nos adjudicamos un proyecto –semilla- en colaboración con los Dres. Cecilia Hidalgo, María Isabel Behrens, Enzo Brunetti y José Luis Valdés, con quienes vamos a hacer un análisis en pacientes con Alzheimer, para explorar su función cerebral y comparar con aquello que está sucediendo en los animales”.


Pero junto a ello, y siguiendo la línea de sus hallazgos, el proyecto contempla suministrar el antioxidante a través de la comida, tanto en las ratas, como posteriormente, en seres humanos. Esto, con la finalidad de avanzar en un potencial tratamiento. “Nuestra expectativa es, a lo menos, prolongar la fase en que el paciente todavía está bien, en el Alzheimer inicial”.


Al mismo tiempo, y en base a los exitosos resultados en cultivo celular, los estudios en modelo animal y clínico, buscan comprobar la eficacia de la sustancia a nivel preventivo. “Sabemos que su empleo no causa daño y no tiene efectos secundarios. Por tanto, es posible recomendar su uso, y especialmente su consumo a través de la dieta, a todas las personas con posibilidades de tener Alzheimer, o a cualquiera que desee cuidar su organismo”.


Mal de Alzheimer

La enfermedad de Alzheimer (EA) es una patología neurodegenerativa, que ocasiona deterioro cognitivo y trastornos conductuales, expresado en pérdida de la memoria y de otras capacidades mentales, a medida que las neuronas mueren y diferentes zonas del cerebro se atrofian. Una vez diagnosticada, la enfermedad suele tener una duración media de 10 años.
Las estadísticas señalan que afecta a aproximadamente un 4% de las personas mayores de 60 años, que Chile es el tercer país de Latinoamérica con mayor incidencia, y que el gasto asociado a la enfermedad equivale al 1% del PIB Mundial.


Al mismo tiempo, existe un 10% de los casos cuyo origen es genético, lo que también incide en que su aparición sea más temprana. El 90% restante, tiene una causa esporádica. En ambos casos, a medida que progresa la enfermedad, aparecen síntomas tales como: confusión mental, irritabilidad y agresión, cambios del humor, trastornos del lenguaje, pérdida de la memoria de largo plazo, hasta una disminución progresiva de las funciones biológicas que, finalmente, conllevan a la muerte. “Debido a esta gran baja de la función cerebral, una persona queda más susceptible y puede fallecer producto de una neumonía u otra enfermedad”, explica Andrea Paula-Lima.


Respecto al diagnóstico, éste se realiza fundamentalmente a través de exámenes neuropsicológicos. Sin embargo, se ha desarrollado recientemente una técnica de tomografía por emisión de positrones, que permite detectar la presencia del amiloide en el cerebro, lo que a juicio de la científica es un gran avance, que se espera pueda ser masificado en diversos hospitales y centros de atención.


No obstante este panorama, la visión de los científicos y profesionales de la salud, es que el estilo de vida puede ayudar a evitar el desarrollo de este mal. Andrea Paula-Lima, recomienda mantener siempre activa tanto la vida intelectual, como la actividad física de cualquier persona. De hecho, señala que se ha comprobado cómo el baile tiene efectos altamente benéficos en la protección contra el Alzheimer.


“Por todo ello, el mensaje principal, es que mientras seguimos estudiando una sustancia que pueda frenar el curso de la enfermedad, lo que podemos hacer es comer bien, hacer ejercicio, y sobre todo, ser feliz”.


Perfil profesional
De profesión farmacéutica, Andrea Paula-Lima es docente de la Facultad de Odontología de la Universidad de Chile e investigadora del Instituto de Neurociencia Biomédica, BNI. Obtuvo su Doctorado en Química Biológica en la Universidad Federal de Río de Janeiro, y un Posdoctorado en el Centro de Estudios Moleculares de la Célula (CEMC) de la U. de Chile. Tiene experiencia en el área de Bioquímica, con énfasis en Neuroquímica, específicamente en modelos de degeneración neuronal en la enfermedad de Alzheimer.


Junto al reciente galardón, ha obtenido otras premiaciones, entre ellas, la selección por el comité de la reunión Anual de los Premios Nobeles en Medicina para participar de la reunión del año 2011 en Lindau, Alemania. Además, el pasado 2012, la Academia de Ciencias para el Mundo en Desarrollo (TWAS por su sigla en inglés) la nombró como Miembro Joven por un período de cinco años, siendo la única persona chilena dentro de la nómina. (Por: Carolina Todorovic. Agencia Inés Llambías Comunicaciones).

 

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